Quedamos en la habitación del hotel, esa habitación disfrazada de un placer prohibido del que habíamos gozado. Sharem percibió en mi rostro la evidencia de que algo no iba bien, mi mirada que siempre transmitía luz, esta vez tenia un no sé que oculto que le hizo sentir inseguro y asustado.
Tragué saliva para deshacer el repentino nudo que se me había formado en la garganta, con todo el dolor de mi corazón teníamos que decirnos adiós, debía darle una oportunidad a mi matrimonio y no podía proyectar mi energía con dos personas en mi corazón. Mientras conversaba con él, mis lágrimas se deslizaban suavemente impregnando el ambiente de una contagiosa melancolía. Él continuaba atento a mis intermitentes explicaciones, sin perder detalle, sin desviar la mirada.
Deseaba volver a ser suya por última vez. Necesitaba ver como sus ojos me entregaban su alma indefinidamente mientras me hacia el amor. Antes de llegar a mi vida ya lo conocía, había estado siempre en mi alma y en mi mente pero él no lo sabía. Me entregué a él y nuestros cuerpos se fusionaron en uno impregnados de una pasión desmedida y unos sentimientos desbordados. Cerré los ojos y permanecí en ese estado de felicidad embriagadora mientras le susurraba al oído: -todo irá bien Sharem- y mentía. Mentía porque sufriría cada vez que alguien pronunciara su nombre, cada vez que otras manos calmaran mi deseo, cada vez que lo viera sin poder decirle un TE QUIERO. Parpadeé mis ojos para no llorar mientras apretaba la mandíbula, abrí la puerta de la habitación y me marché. Al llegar al coche miré por la ventana, quería verlo por última vez y recordar esa imagen. Apoyé mis manos y cabeza en el volante y lloré amargamente.
De vez en cuando intentamos coincidir y cuando nuestros ojos se cruzan con anhelo, todavía siento esa excitación que sólo él es capaz de provocar en mi cuerpo. Y mientras las comisuras de nuestros labios se estiran para moldear una íntima sonrisa él todavía se pregunta porqué no me quedé con él, es entonces cuando me pierdo en sus ojos e imagino con dulzura como esperaría una eternidad por él para encontrarnos en otra vida; con otros cuerpos, sin miedos, sin obligaciones, quizás entonces tengamos la oportunidad de vivir esa vida que nos robaron en esta.
Es el principio del final de una historia envuelta de pasión, erotismo, países exóticos y romanticismo. Cuantas veces se toman decisiones que aunque son las más correctas, no son las más acertadas después de cometer una locura para hacer algo interesante!! Espero que os haya gustado y como siempre.... me encantaría leer vuestros comentarios. Un besazo!!!
Que bello!!!
ResponderEliminarGracias Miriam!!!! Un abrazo.
EliminarBonita historia
ResponderEliminarMe alegro de que te guste Tomás . Un saludo.
EliminarQué historia más preciosa, hace latir el corazón! Me encanta Elia, sigue escribiendo eres una Artistaza.
ResponderEliminarMmmmmmm ja et trobava a faltar!!!! Un petó molt gran.
Eliminarprecioso
ResponderEliminarGracias Chelo!!! Un saludo
EliminarUna historia muy bonita y muy real! Felicidades, me ha encantado :)
ResponderEliminarMoltes gràcies MIreia. Me alegro de que te guste y como bien dices, muy real para mucha gente. Un beso
EliminarSegueix escribint........no ho deixes mai carinyet!!! ♡
ResponderEliminarGuapa!! M'alegra veure't pel blog. Un petonàs molt gran.
EliminarES UNA HISTORIA QUE LEVANTA AMPULA...
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